Trump firma orden ejecutiva para impulsar la minería en aguas profundas
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha firmado una orden ejecutiva dirigida a acelerar el desarrollo de la minería en aguas profundas, con el objetivo de reducir la influencia de China en el suministro global de minerales críticos.
Esta medida busca potenciar la extracción de elementos estratégicos como níquel, cobre, cobalto y tierras raras, esenciales para la fabricación de tecnologías limpias como baterías de vehículos eléctricos, turbinas eólicas y paneles solares.
Una estrategia con enfoque geopolítico
La administración Trump declaró que esta iniciativa responde a un interés nacional en la seguridad económica y tecnológica, además de ser una acción estratégica para garantizar que las empresas estadounidenses puedan competir y liderar en el desarrollo responsable de recursos marinos.
Según la orden ejecutiva, también se fortalecerán las alianzas con países aliados, pero se procederá sin acudir al marco normativo establecido por el organismo regulador internacional, la Autoridad Internacional de los Fondos Marinos (ISA).
Beneficios y polémica en torno a la minería submarina
Defensores de la minería en aguas profundas aseguran que podría ser una industria lucrativa y menos perjudicial que las operaciones en tierra, proporcionando acceso a recursos clave para las transiciones energéticas.
Sin embargo, científicos y grupos ambientalistas advierten que los impactos ecológicos de esta práctica son aún impredecibles. Temen que pueda causar destrucción de ecosistemas marinos, pérdida de biodiversidad y daño irreversible al medio ambiente.
En este sentido, Arlo Hemphill, de Greenpeace USA, calificó la iniciativa de «un insulto al multilateralismo», denunciando que se trata de un intento de eludir el proceso internacional para explotar recursos en alta mar de forma sostenible.
Tensiones geopolíticas y reacciones internacionales
La decisión unilateral de avanzar sin el respaldo de la ISA ha generado reacciones encontradas en la arena global. Más de 40 países, incluidos China, Rusia y Reino Unido, han mostrado su oposición, mientras que Noruega, que previamente exploró esta práctica en sus aguas, también se ha alineado con otras naciones para criticar el enfoque estadounidense.
Analistas señalan que esta acción podría intensificar tensiones geopolíticas alrededor de los recursos marinos en aguas internacionales.
Un futuro en juego
Mientras continúan los debates sobre la sostenibilidad y la regulación de la minería submarina, la ISA tiene como meta acordar normas claras para 2025. Sin embargo, la prisa de la administración Trump por acelerar esta industria deja en el aire preguntas sobre cómo enfrentar la competencia internacional y equilibrar el desarrollo económico con la protección ambiental.
Descargo de responsabilidad: El contenido de este artículo refleja únicamente la opinión del autor y no representa en modo alguno a la plataforma. Este artículo no se pretende servir de referencia para tomar decisiones de inversión.
También te puede gustar
Gitcoin Cierra Gitcoin Labs y Enfoca su Programa de Subvenciones
El primer spot ETF de XRP: por qué el plomo de Brasil es más importante de lo que piensas
Top 3 criptomonedas por menos de $1 a observar en mayo de 2025
Los Inversores Impulsan el Aumento de los ETFs de Bitcoin
En tendencia
MásPrecios de las criptos
Más








